Frío,
frío,frío……..no me apetece
salir a correr, con lo a gusto que estoy en casa calentito, salir con
el día que hace, ni loco. Me voy a sentar
tranquilamente a leer un poco ahora que no me molesta nadie, que
corran otros, ya vendrán días
mejores en los que caliente el sol y la temperatura sea más
agradable.
Ha
todos nos ha pasado alguna vez que por la climatología
no hemos salido a realizar nuestro entreno, ya sea por frío, viento,
lluvia. El caso es que nos da pereza porque el arrancar es más duro,
la musculatura está rígida, vamos
incómodos debido a que llevamos varias
capas de ropa, pensamos en que estaríamos
mejor en casa calentitos… Varios factores que hacen que entrenar en
esta época que ahora comienza sea un sacrificio mayor que en otras
ocasiones.
Pero
nuestro espíritu runner hace que nos
sobrepongamos a estas condiciones y nos calcemos nuestras zapatillas
ultimo modelo, mallas largas, camiseta térmica, cortavientos , buff,
gorro, guantes, uf,uf,ufff que agobio tanta ropa si después nos
vamos quitando capas como una cebolla, hay gente con unas pintas que
mas que ha correr parece que vayan a los carnavales.
La
verdad es que el invierno no es la mejor estación del año para
salir a correr, pero ya que está aquí y nosotros queremos seguir
disfrutando de nuestro deporte, no queda otra que disfrazarnos y
salir a la calle mirando primero por la mirilla de la puerta de casa
para no cruzarnos con ningún vecino que nos reconozca, una vez en la
calle con el gorro y el buff hasta las orejas ya nadie nos
reconocerá.
Ahora
toca empezar a trotar poco a poco mal diciendo
haber salido ya que las manos y los dedos de los pies están ya en
estado de congelación, la nariz ni te cuento, los pulmones apunto de
estallar con cada respiración, pero seguimos adelante en breve todo
esto pasará.
Llevamos
un cuarto de hora y nos empezamos a encontrar a gusto, la sensación
de frío va pasando y cogemos la temperatura óptima, la zancada va
siendo mas fluida y nos vamos des engarrotando,
buenas sensaciones.
Media
hora llega el periodo denominado cebolla, “me sobra todo maldita
sea la hora en que decidí ponerme las mallas largas si no hacia
tanto frío” el buff en el cuello, el gorro metido en las mallas,
los guantes…….no se que hacer con ellos, estoy asfixiado tanto
calor, me bajo la cremallera del cortavientos.
Una
hora parece que estemos en verano, “quien decía
frío si voy empapado de sudor haber si llego a casa de una vez”,
sudas más que en pleno mes de Agosto la cantidad de ropa que llevas
te tiene agobiado, pero has superado la prueba y no te has quedado en
casa.
Correr
cuando hace frío nos endurece, la capacidad de sufrimiento aumenta
ya que las condiciones no son las idoneas y adecuadas para la
práctica del running. Al superar condiciones adversas como estas
hace que seamos mas tolerantes a los malos momentos de la competición
cuando nos sentimos agobiados por el esfuerzo y nos sobrepongamos
rápidamente para seguir al máximo de
nuestra capacidad.
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